El siglo XVIII de nuestra era, en pleno auge del Neoclasicismo, también conocido como "El Siglo de las Luces" causó mucho interés el predominio del uso de la razón como el camino hacia el desarrollo del hombre valiéndose de la ciencia para encontrar las respuestas a sus inquietudes humanas.
Esto contribuyó en que lo empírico y supersticioso se deseche del conocimiento humano por ser considerados como inexactos y nada favorables para consolidar los intereses de la sociedad europea de esa época.
Esto se explica en que el hombre encontró en el uso de su razón como la luz que ilumina su saber, así surgió el Racionalismo como una corriente de ideología basada en la razón. Es indudable su trascendencia a todo Europa, y luego hacia el resto del mundo.
Es difícil negar que el Neoclasicismo como corriente cultural no dejó de causar un gran revuelo en la sociedad europea por los cambios radicales que surgieron en el pensamiento del hombre.
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